Casos de botulismo en lactantes provocan alerta sobre los chupetes con miel

News Release
Comunicados de prensa
16 de noviembre de 2018

Comunicado de prensa
16 de noviembre de 2018

Los niños menores de 12 meses no deben consumir miel

El Departamento Estatal de Servicios de Salud (DSHS) de Texas advierte a los padres y otros adultos que no den a los bebés chupetes que contengan miel, después de que cuatro bebés han sido tratados por botulismo en Texas. A cada uno de los lactantes se les había dado un chupete que contenía miel, adquirido en México.

Las cuatro enfermedades ocurrieron entre mediados de agosto y finales de octubre y provocaron que los cuatro bebés fueran hospitalizados para recibir tratamiento que les salvó la vida. Los bebés, entre los que no hay ninguna relación de parentesco, viven en distintas áreas del oeste, norte y sur de Texas.

El botulismo es una grave enfermedad causada por una toxina que ataca el sistema nervioso y puede causar dificultad para respirar, parálisis e incluso la muerte. La miel puede contener bacterias que producen la toxina del botulismo en el intestino de los bebés que la consumen. Para cuando un niño cumple 12 meses de edad, ya ha desarrollado otros tipos de bacterias en su tracto digestivo que son suficientes para prevenir que la bacteria del botulismo crezca y produzca toxinas.

El DSHS también emitió hoy una alerta sanitaria en que pide a los proveedores médicos que estén atentos a los casos de botulismo infantil y les recuerden a los padres que no permitan que los bebés consuman miel. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades y la Academia Americana de Pediatría han advertido durante mucho tiempo que los niños menores de 12 meses no deben consumir miel.

Los chupetes rellenos de miel no son comunes en los Estados Unidos, pero pueden estar disponibles en algunas tiendas especializadas y a través de minoristas en línea. La mayoría de los chupetes no están diseñados para que la miel sea ingerida, pero algunos tienen un pequeño agujero por el que fluye la miel y el niño la consume; también puede suceder que, por accidente, el chupete se rompa y gotee. Los padres también deben evitar los chupetes que contengan cualquier otra sustancia alimenticia, ya que también podrían representar un riesgo de botulismo.

En Texas se han producido de siete a ocho casos de botulismo infantil anuales en los últimos años. En 2018 se han notificado diez casos confirmados o sospechosos. Puede obtener más información sobre el botulismo en el sitio web del DSHS.

-fin del comunicado-

(Contacto: Chris Van Deusen, director de Relaciones con los Medios del DSHS, 512-776-7119)

Página en inglés de la Oficina de Prensa del DSHS en Twitter