Prevención y la PrEP
Hacerse una prueba y recibir tratamiento es una poderosa forma de prevención, y las pruebas de detección rutinarias del VIH juegan un papel clave en el diagnóstico de personas que desconocen su infección por VIH. El diagnóstico y tratamiento temprano del VIH reducen el riesgo de transmisión en un 96 por ciento. Si se mantienen atendidos a los pacientes, mejorarán los resultados de su salud.
La profilaxis preexposición (PrEP) es una importante opción de prevención del VIH para las personas que corren un alto riesgo de contraerlo. Cuando se combina con el uso de condones y otros métodos de prevención, la PrEP proporciona una protección aún mayor que cuando se utiliza sola. Las personas que utilizan la PrEP deben comprometerse a tomar el medicamento todos los días y a acudir a su médico para un seguimiento cada tres meses.
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